A todos nos encanta llegar a casa y sentirnos relajados, cómodos y a gusto. Conseguir el bienestar, pero, no es tarea fácil, sino que es más un conjunto de factores, detalles, objetos, texturas, iluminación… y no se consigue de la noche a la mañana. Por eso, hoy, te mostramos algunos trucos para conseguir un hogar acogedor y confortable.
La luz y la iluminación es uno de los aspectos más importantes a la hora de tener en cuenta:
Aunque sea tirarnos piedras a nuestro propio tejado, intenta que predomine y entre la máxima luz natural posible. La luz del sol aporta energía, vitaminas y confort. Con paredes blancas aumentarás la sensación de luz. Colocando espejos en el lado contrario de las paredes también conseguirás amplitud y más luz.
Y bien, cuando la luz natural ya no sea visible, es nuestro turno: Una luz fría incitará a la concentración mientras que una luz cálida, inducirá al confort y al relax. ¡No abuses de los lúmenes! Y apuesta siempre por el LED, piensa que la tecnología LED es mucho más potente que la incandescente, a parte de más sostenible y eficiente. Para que te hagas una idea, busca bombillas que emitan una temperatura de color entre 2200ºk – 3000ºk.
Un tipo de lámpara recurrente pero que nunca pasa de moda es la lámpara de pie de toda la vida: seguramente te suene a clásico o aburrido, pero ni mucho menos. Existen una gran cantidad de diseños de lámparas de pie de todo tipo: las pantallas de tela, por ejemplo, ejercen de difusor de la luz, combinadas con pie de madera, o una pantalla de tejido natural de rafia conseguirás un rincón muy cálido y acogedor.
¡Mejor que sobre que no falte! Rincones oscuros o sombras indeseadas pueden ser motivo suficiente para romper la harmonía de tu hogar, para evitarlo, complementa la iluminación con alguna lámpara auxiliar ya sea una lámpara de mesa o un aplique de pared. Un ilumina cuadros en el pasillo, por ejemplo, ocupa poco espacio en la pared, sirve como objeto de decoración y además crea un juego de luces cálido muy agradable. Los apliques de pared de varillas, por su parte, son una tendencia en iluminación muy en auge en las últimas temporadas: son modernos, elegantes y no consumen mucho.
El estilo rústico es uno de los diseños más cálidos y acogedores por excelencia: si te parece algo anticuado, el country charm (inspirado en la Provenza francesa), dará un toque femenino y acogedor. Inspírate en los tonos claros y cremas, con toques color lavanda. En materia de tejidos, apuesta por las fibras naturales: rafia, algodón o lino aportarán calidez suavizando la luz. También una lámpara con el cristal transparente, creará una sensación cálida muy acogedora.
Todos estos modelos los encontrarás en nuestra tienda on-line Luz Vintage (www.luzvintage.es). Para consultar descuentos para profesionales y modificaciones en las medidas y los acabados escribe a [email protected].
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